Como viene siendo habitual, con motivo de las Fiestas en Honor a San Francisco de Asís, durante el mes de octubre se invitó a los feligreses a compartir alimentos con los más necesitados que serían distribuidos por Cáritas Parroquial.
Y así ha sido, un mes de fiesta litúrgica, cultural y lúdica en la que no nos hemos olvidado de los necesitados. Y es que, aunque sean austeras, ¿cómo hacer fiesta olvidándonos de los que no tienen "nada" que celebrar? La fiesta cristiana auténtica es aquella capaz de integrar e igualar a toda la comunidad, independientemente del status económico de cada uno, porque el motivo para celebrar es común a todos, es más, se convierte en el argumento de la esperanza para los necesitados y de la generosidad para las mejores economías.
Este fin de semana, primero de mes de dedicado a Cáritas, servirá para agradecer a la comunidad parroquial por los alimentos recogidos, así como para agradecer a personas anónimas e instituciones su apoyo económico.
¡¡¡GRACIAS A TODOS!!!